domingo, 27 de julio de 2014

Gracias por la vida compartida!


Hoy el BLOG cumple 7 años de VIDA 
No tenía idea al comienzo de lo que iba a significar este espacio y mis palabras soltadas sin pudor en estas "páginas" en blanco. 
Venía de un tiempo doloroso, difícil. No era precisamente una temporada de mirada muy en alto, ni de una "esperanza demencial"; pero sí desde dentro experimentaba una fuerte necesidad de esperanza y de restauración. 
Empecé por poner palabras a ese deseo. No sabía o no era del todo consciente del alcance de un blog, de un espacio virtual. Solía ser visitante silenciosa de otros espacios, y en unos pocos, a veces, me animaba a comentar. No pensaba en quién leía, solo buscaba expresarme, hacer el ejercicio de tejer desde el alma con las palabras que pudiera, mis latidos. 

Mi amigo del alma sin saberlo me dio una inspiración. En una carta compartida desde su misión de entonces, hacía referencia a la "esperanza que construye mientras espera"; y también, la invitación a "levantar la mirada". 
Dos claves que desde entonces me acompañan. A veces como susurros suaves que me animan a seguir en el camino que voy, otras veces como una voz un poco más fuerte para recordarme que no debo perder la esperanza, o para re-orientarme si me distraigo de la vida, o incluso para hacerme recuperar dignidad si voy con los ojos en el suelo olvidando de Quien soy hij@ amad@.

En el camino este blog se fue entramando con otros espacios, con personas, con vidas. 
En 7 años uno vive muchas cosas, puede cambiar lo que pensaba, serenar sentires, abrir otras ventanas. Siete años de blog se vuelven regalo para mí, ojalá que también para otros.
Regalo porque son posibilidad de releer mi historia desde las palabras que fueron espejando por donde iba el corazón: las alegrías, los enojos, las ilusiones, los encuentros, las despedidas, las búsquedas, los silencios, la fe, las personas

Gozo especialmente de mis entradas "dedicadas", siento que es un modo especial de celebrar el camino con aquellos que me animan a vivir bien, a ser mejor persona, a mirar más limpio. 

Hace unos días, el mismo amigo/hermano querido que fue inspiración al título, y que está tan presente en este espacio, decía en un espacio comunitario que era muy lindo ser testigo de que "vamos creciendo juntos". Y en silencio, mientras lo escuchaba, sentí que mi corazón aplaudía esa constatación, esas palabras. Si se pudiera poner un tercer título en algún lugar del blog, HOY sería: "como testigos de que vamos creciendo juntos".

Creo que todos necesitamos esperanzarnos, hacernos ese regalo mutuamente, sobre todo cuando las cosas parecen más turbias, más cerradas, con menos ilusión; unir nuestras esperanzas sin mezquindad, aportar algo aunque parezca mínimo...casi nada.

Me siento muy agradecida, especialmente, por las personas con las que mi vida se va entretejiendo, y que embellecen lo mío con su propia vida, que me reciben y quieren como soy, que encienden con pequeños gestos mis ganas de seguir creyendo en las personas, en los procesos, en los tiempos de espera. 
Gracias a quienes acogen lo mío con ternura y se vuelven auténticos compañeros de camino. Gracias a los que alguna vez me hacen saber que se sienten en algún punto sintonizando con mis palabras, o que les ayuda en algo lo que expreso. Gracias a quienes se han animado a dar un paso más y salir del anonimato y compartir lo propio.Y GRACIAS a Dios por regalarme la posibilidad de decir, de disfrutar de esto, de hacer fiesta en el alma hoy por la vida compartida.

Siete años... las "bodas de LANA"....jeje
Las bodas de lana son sin lugar a dudas invitación clara a seguir entretejiendo vida, esperanza, sueños, plegarias, pasos. En la certeza de que en esto no estamos haciendo nada "solos". El verdadero Tejedor tiene mirada de todo el diseño, uno es un hilito no más; pero un hilito que puede aportar color y belleza a la trama final.
Ese quiere ser mi compromiso y mi intento renovado en este cumpleaños. Ese mi deseo tres veces dicho con los ojos cerrados a punto de soplar las velitas. 
Nos invito y nos animo.
Feliz cumpleaños a todos los que participan "visibles" o "invisibles" de este lugar!!

sábado, 19 de julio de 2014

AMIGOS


(Podría escribir sus nombres esta vez, pero voy a hablar de ellos no hablando solo de ellos, y entonces prefiero guardar algo más que solo nombres. 
Sé que si pasaran por acá, podrían reconocerse entre mis letras, así que los nombro para adentro mientras pido a Tata Dios que los bendiga especialmente, y le doy gracias por tanto regalo de camino.)

Cuando la tristeza me ganaba el corazón, y mis pedidos de auxilio eran desesperados, cuando no podía mirar más allá de algún pozo, cuando solo podía apacentarse mi impaciencia con cariño…

Cuando alguna encrucijada del camino me acobardaba demasiado, y me hacía irremediablemente ir para atrás a riesgo de perderme, cuando no encontraba la salida y mi encierro solamente podía ser contrarrestado con confianza…

Cuando abulia y desgano eran fuertes potencias, cuando el sinsentido parecía el único sentido, cuando ese adormecerse frente a la vida solo podía ser despertado con ternura…

Cuando la desesperación y alguna bronca se hospedaban en mí, cuando el enojo me hacía fruncir ceño y corazón, cuando mi puro gesto de defensa necesitó ablandarse con escucha…

Cuando el dolor me traspasó la historia, cuando la noche parecía interminable, cuando el silencio de la no respuesta y la “injusticia” era tan insoportable que solo un abrazo sincero y cercano podía ser descanso…

Cuando la soledad se hizo temible, y parecía que ya no habría manera de volver a celebrar en el camino, cuando cada paso carecía de sentido a mis ojos, cuando no había manera de mirar más lejos a menos que alguien viniera a recordarme que era necesario levantar la mirada…

Cuando fue empezar de nuevo después de los fracasos, cuando necesité reconocerme nuevamente capaz para el camino, cuando la desconfianza hacia mí misma encontró algún eco cerca diciendo en convencido acto de fe “vos podés”…

Cuando mi imagen estaba tan distorsionada que ya no podía reconocerme a mí misma, cuando mi identidad era solo un listado de errores y debilidades personales, cuando no podía mirar a los ojos y era necesario un espejo verdadero que pudiera devolverme en reflejo también mis cosas valiosas…
Y también…

Cuando la alegría fue tanta que el corazón se me saltaba del pecho y necesitaba compartir, cuando hubo un otro cercano celebrando conmigo y uniéndose a mi fiesta…

Cuando el perdón se hizo regalo, cuando las defensas se fueron diluyendo y pude salir de mí misma a encontrarme con otros…

Cuando pude constatar la mirada de esperanza en la presencia inamovible de ese amigo, una paciencia y una confianza a prueba de todo…

Cuando la vida me sonríe y tengo ganas de cambiar el mundo empezando por mí…

Cuando los ojos miraron adelante con serena confianza y  escuché en claro aliento la voz cálida y única de quien me conoce, me cuida, y me quiere como soy…

Cuando soñé chiquito o cuando soñé a lo grande, y pude sentirme comprendida, acompañada, alentada …

Cuando el silencio, cuando la canción, cuando la necesidad, cuando lo gratuito, cuando la alegría, cuando algún pesar, cuando el desafío, cuando el descanso, cuando la rutina, cuando la sorpresa, cuando la verdad, cuando lo secreto, cuando hubo rumbo, cuando todo fue confuso…

Ahí han estado SIEMPRE unos compañeros de camino tan maravillosamente valiosos que casi me parece mentira que pueda haber sido “merecedora inmerecidamente” de tanto, tanto, tanto REGALO.

Cuando pienso en estos compañeros de camino que se me ha regalado conocer y compartir; se me conmueve el corazón con una alegría tan inmensa que difícilmente podría decir en palabras. 
Si el corazón hablara, sé que solo podría repetir una y otra vez, GRACIAS..GRACIAS…GRACIAS!

miércoles, 16 de julio de 2014

del ser descubiertos, mirados, y llamados a la luz.


Se cubre con sus manitos, los ojos, y pregunta: "-¿dónde está Sofía?"
Sabe que la vemos, que la estamos mirando ahora. Toda ella está al descubierto pero piensa que si cubre sus ojos somos nosotros quienes no podemos verla.
Los ojos cerrados y tapados con sus manos, la hacen sentir lo suficientemente oculta. 

Entonces insiste: "¿Dónde está Sofía?". Porque no le basta con saberse mirada, necesita sentirse buscada. 

Ahora digo fuerte, alrededor de ella: "¿Sofía, donde estás?", se esfuerza por no moverse, se adivina una sonrisa nerviosa apenas escondida debajo de sus manos. 
Me acerco, y le rozo apenas el flequillo... "dónde estará Sofía" digo para que me escuche, insisto "dónde se habrá metido Sofía".  
Cada vez que la nombro sus manos están a punto de caer y devolverla a la luz.

Hasta que al fin... se destapa la cara, abre los ojos y dice con voz fuerte y alegre "acá está Sofía". Aplausos, alegría, abrazo y foto.

Fin del juego.


¡Gracias Sofía! En mi propio juego muchas veces ha habido algún otro que me ha llamado por mi nombre, que me ha mirado, y que se ha asegurado de que me supiera "buscada-mirada". Que me ha seguido el juego, que me ha esperado con paciencia de dioses, que no se ha movido de mi lado hasta que al fin decidiera o pudiera quitarme las vendas/manos (historias-pesadumbres-complejos-desilusiones...) de los ojos. Me han repetido de muchos modos, con otras palabras seguramente, pero con mismísima insistencia mi nombre y he sentido en sus maneras de nombrarme el deseo de encontrarme. 
He pasado de la inmovilidad de mis miedos y penas, a la tranquilidad que me regalaban las voces amigas que me llamaban a salir de la guarida.
Tu juego inocente, espontáneo, simple, me revela algo lindo y hondo: que fácil es dejarse encontrar, salir a la luz, cuando sabemos que hay alguien ahí mirando-buscándonos, esperando por nosotros, con nosotros, al lado nuestro para hacer fiesta. 
Ser encontrados para volver a ver. 

de GESTOS que salvan...

Irrumpís con sorpresa, 
con detalles increíblemente delicados, 
oportunos, hermosos. 
En el momento que no espero, 
y cuando más lo necesito. 
Una y otra vez en estos días, 
una y otra vez...

Qué maneras de decirme 
que estoy en Tus manos, 
que estás sosteniendo 
mi fragilidad completa, 
mis sentires poco felices de estos días. 

Qué manera de ponerme en imposibilidad 
de dudar de que estás en camino, 
conmigo, 
de que vamos juntos.

Aunque la cabeza me dice que voy sola 
y parezca que no te encuentro 
en ninguna parte, 
me cercás el corazón 
de un modo tan tierno y tan cuidadoso, 
que siento que puedo bajar la guardia, 
abrir el alma, descansar-me en Vos.
 
Señor de mi descanso, 
Señor de la infalible calma 
en mis tormentas, 
Señor de la alegría... 
CREO en Vos.


sábado, 12 de julio de 2014

Cuidar el alma...

Ahora pongo delante tuyo el corazón sin máscaras. Sé que podrías adivinar de donde me vienen los cansancios, las frustraciones, la desilusión, algunas penas, el hastío, sin que hagan falta las palabras. Tenés el don de leer almas y eso no me intimida, al contrario me regala paz. 


Puedo ser yo en mi versión más verdadera, sin tener que salir a ganarme tu cariño ni tu aceptación. No "tengo" que hacer nada para merecer-te. Me reflejás de mil modos el modo de querer de Dios, al menos lo que intuyo o creo de Su modo de amar. 



Me regalás en manantiales de cariño gestos mínimos que a mí se me hacen enormes. Envuelven todo lo que en mí descubro ensombrecido para alumbrar misericordia y corajes, para dar brillo a una alegría que a veces se me hace cuesta arriba.


Ahora, en el ahora de cada uno de mis días, saber que puedo descansar-me en tu cariño, en el abrazo que salta de la foto y del recuerdo para actualizarse siempre que así lo necesite, en las palabras dichas a la orilla de los sueños y de la verdad... me serena el impulso de rendirme, de bajar los brazos, de perder el ejercicio de sonreír aún sin ganas.

No necesitás razones para quererme. Me querés desde una gratuidad que maravilla. ¡Querés quererme! Es de lo más liberador que alguien hubiera podido regalarme.
De mi historia, arrancaste por el capítulo más negro, y te quedaste. Ahora sé que te quedaste para siempre.
Gracias por cuidarme el alma. Gracias por acompañarme a vivir.






sábado, 5 de julio de 2014

CLARA


Clara se adelanta a los cálculos, a lo previsto, y nos regala sorpresa desde el primer día.
Ahora duerme y sueña. 

La entrada a este lado de la vida parece que la deja algo cansada, pero la paz que destila cada gesto pequeñito de su cara me hace pensar que desea estar entre nosotros, que ya nos quiere.

Clara duerme y no puedo dejar de verla, de conocerla, de grabarme en el alma su pequeñez completa que me abre a otro amor. La sostengo por un rato, mientras siento que son segundos en los que ella me sostiene a mí, aunque no lo sepa. 

Clara me conecta, sólo con vivir, a la alegría. Quiero ir rápido a casa y cambiar mi ropa negra para vestir algo de color. 

Clara es una espera que se vuelve bienvenida. Es mi hermanita convertida en madre, una madre hermosa y feliz. Es mi cuñado, asumiéndose padre y compañero, con una ternura que madre e hija se merecen.

Clara es parte feliz de la historia, Buena Noticia, Amor en estado puro.

¡BIENVENIDA CLARITA! 

¡Qué regalo lindo son mis 4 sobrinitas! Amo ser tía ♥




jueves, 3 de julio de 2014

Heridas de vida...

Dí por "casualidad" con una imagen y un texto que hacían referencia al Kintsugi*.

No sabía lo que era, así que me puse a leer algo más. Tengo por natural ir leyendo las cosas -lecturas propiamente dichas, imágenes, sensaciones, paisajes, historias, todo...- más allá de lo que dicen. Me descubrí leyendo mucho más lejos que "el arte japonés de reparar fracturas....".

Pensé en las personas en general, pensé en mí, cual si fuera cada uno de nosotros ese objeto roto, fracturado, afeado, en baja de valor. Pensé en lo facilmente desechables que podemos volvernos a nuestros ojos y a los de los demás cuando no vemos "en posibilidad" lo  que nos sucede. Cuando perdemos esperanza en la "reparación", en que las cosas cambien, en la conversión.

No solo es reparar, y acá viene lo que para mí guarda un secreto maravilloso aplicable a las cosas del alma, del corazón, de la vida en su centro más vital. El arte no solo de reparar lo roto, sino de resaltar con absoluto valor las grietas, las heridas, poniendo en un lugar bien visible aquello que es más propicio ocultar. Incorpora la herida, la realza, la acepta, la sana sin borrarla, la cubre de oro, de valor, de belleza.

Ahora el objeto -léase también corazón de cada uno- toma un valor nuevo, superior incluso, y no es el oro o la belleza de la herida, sino la aceptación de la historia y sus posibilidades de transformación. 

Como esa canción de Meana "no ves el hilo de oro de la Pascua, que re-diseña todo lo que cruza".


*Kintsugi (金継ぎ?) (Japonés: carptintería de oro) orKintsukuroi (金繕い?) (Japonés: reparación de oro) es el arte japonés de arreglar fracturas de la cerámica con barniz de resina espolvoreado o mezclado con polvo de oro , plata o platino. 

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...